El seguimiento adquiere la profundidad de aquel que libremente te llama a seguirlo, y en ese servicio, aunque aparentemente, no se reciba la recompensa esperada, se realiza por el amor libre que se tributa a Dios y es lo que te mueve a entregar tu vida libremente en aras del Reino de Dios.
Comentario al Evangelio por fray Juan Manuel
https://www.dominicos.org/predicacion/evangelio-del-dia/12-11-2024/