Miércoles 13 de junio de 1917; después de rezar el Rosario con unas 50 personas vieron otra vez a Nuestra Señora sobre la encina; la Virgen les pide que sigan acudiendo el día 13 que no dejen de rezar el Rosario y que aprendan a leer; también les hace saber que pronto se llevará al cielo a Jacinta y a Francisco y que Lucía vivirá para que de a conocer el Inmaculado corazón de la Virgen María.
Esta sería también la primera vez que verían un corazón rodeado de espinas, el corazón Inmaculado de la Virgen María.