Esta célebre obra atiende a los sentimientos de inferioridad que el ser humano puede padecer. Desde un relato alegórico que busca reflejar el rechazo de la sociedad a personas con defectos físicos o mentales, o que no alcancen los parámetros "mínimos" de éxito profesional o social, quienes pueden llegar a sufrir emocionalmente casi al nivel de Gregorio Samsa, quien llegó a sentirse físicamente: como un insecto repulsivo. En este sentido, muchos críticos piensan que refleja el propio temperamento del escritor, hombre retraído y "desubicado" en la sociedad. Pero también refleja una dura y cruda crítica a cómo tratamos y queremos a algunas personas mientras nos representan una ventaja, mientras nos ofrecen algo, y cómo en el fondo somos totalmente egoístas y damos preeminencia absoluta a nuestros deseos y necesidades frente a las de los demás, reflejando al egoísmo como la desdicha ajena que nos carcome hasta tal punto de hacernos infelices sin realmente tener mucho fundamento.