El propósito de nuestra vida no se busca, sino que nos encuentra. Es el camino “de las miguitas de pan”: es cuestión de seguir lo que sabemos y lo que intuimos. Y aunque no podemos saber cuándo tendremos la claridad acerca de ese propósito, sí que podemos hacer nuestra parte: escudriñar eso que sabemos y lo que sentimos. Te dejo estas 7 preguntas para reflexionar. 1. ¿Qué harías si tuvieses el éxito garantizado? 2. Si recibieras un premio, ¿de qué sería? 3. ¿Qué podría no ser imposible y cambiar tu vida? 4. ¿Qué es lo que te apasiona? 5. ¿Sobre qué sueles leer (o ver videos, películas, escuchar podcast...)? 6. ¿Qué haces cuando no haces? (es decir, en tu tiempo «libre») 7. ¿Para qué te buscan las personas?